Las hospitalizaciones por COVID-19 están aumentando una vez más debido a una sexta ola de la pandemia; pero las oficinas aún están alentando a sus empleados a volver al trabajo a medida que se levantan las restricciones y los mandatos.
¿Tiene derecho a negarse a trabajar en persona si no se siente cómodo/a? El abogado laboral Jon Pinkus afirma que que no es posible.
“Si su empleador le pide que vaya a la oficina y estaba trabajando desde la oficina antes de la pandemia y dice 'No, no voy a volver'. Eso podría considerarse abandono del empleo”, dijo Pinkus.
Una encuesta de Business Development of Canada encontró que al 55 por ciento de los empleados les gustaría continuar trabajando desde casa incluso cuando termine la pandemia. Si bien la provincia funciona de manera muy similar a como era antes de la pandemia, el número de casos de COVID-19 y las tasas de transmisión sugieren que la pandemia continúa.
Señales de aguas residuales de la semana pasada mostraron que Ontario probablemente tiene entre 100.000 y 120.000 nuevos casos de COVID-19 por día.
Pinkus agregó que hay algunos casos únicos en los que un empleador tendría que otorgarle a alguien la capacidad de trabajar desde casa.
“A menos de que tenga algún tipo de excusa ineludible, por ejemplo, su médico dijo 'No, no es seguro para esta persona trabajar con otras personas', esa es una historia diferente”, dijo Pinkus. “En ausencia de algo así, se tendrá que seguir la directiva del empleador”.
Aún así, Pinkus afirmó haber descubierto que algunos empleadores parecen estar de acuerdo con un arreglo híbrido. Pero un lugar de trabajo flexible no siempre es posible, especialmente para aquellos que trabajan en restaurantes y espacios de entretenimiento.
Durante la pandemia, algunos optaron por mudarse fuera de la ciudad a pequeños pueblos y cabañas, con la esperanza de poder seguir trabajando desde casa, ya sea a tiempo parcial o completo; pero Pinkus dijo que todo dependerá de lo que permitan los empleadores en cada caso particular.
ARTÍCULO POR: MALEEHA SHEIKH
EDICIÓN Y TRADUCCIÓN POR: ELIANA GONZÁLEZ
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