La demanda, presentada directamente en la Corte Suprema, buscaba impedir que Georgia, Michigan, Pensilvania y Wisconsin emitieran sus votos electorales por Joseph R. Biden Jr.
La Corte Suprema rechazó el viernes una demanda de Texas que le había pedido a la corte que desechara los resultados de las elecciones en cuatro estados de campo de batalla que el presidente Trump perdió en noviembre, poniendo fin a cualquier posibilidad de que un intento descarado de usar los tribunales para revertir su derrota en las encuestas tendrían éxito.
El tribunal, en una breve orden sin firmar , dijo que Texas no tenía legitimación para continuar con el caso, diciendo que "no ha demostrado un interés judicialmente reconocible en la forma en que otro estado lleva a cabo sus elecciones".
La orden, junto con otra que rechazó el martes una solicitud similar de los republicanos de Pensilvania, señaló que un tribunal conservador con tres jueces designados por Trump se negó a participar en el esfuerzo extraordinario del presidente y muchos miembros prominentes de su partido para negar su victoria a su oponente demócrata, el exvicepresidente Joseph R. Biden Jr.
Fue el último y más significativo revés para Trump en una campaña de litigios que fue rechazada por los tribunales en todo momento.
La demanda de Texas, presentada directamente en la Corte Suprema, impugnó los procedimientos electorales en cuatro estados: Georgia, Michigan, Pennsylvania y Wisconsin. Pidió a la corte que prohibiera a esos estados emitir sus votos electorales por Biden y que trasladara la selección de electores a las legislaturas de los estados. Eso habría requerido que los jueces arrojaran millones de votos.
Trump ha dicho que esperaba prevalecer en la Corte Suprema, luego de apresurar la confirmación de la jueza Amy Coney Barrett en octubre, en parte con la esperanza de que ella votara a favor de Trump en las disputas electorales.
La orden del viernes no fue del todo unánime. El juez Samuel A. Alito Jr., acompañado por el juez Clarence Thomas, emitió una breve declaración sobre un punto técnico. Sin embargo, fue una reprimenda integral para Trump y sus aliados. Era evidente que los jueces no tenían paciencia para el intento de Texas de alistar a la corte en un esfuerzo por decirles a otros estados cómo llevar a cabo sus elecciones.
La mayoría dictaminó que Texas no podía presentar su demanda en absoluto. “La moción del estado de Texas de autorización para presentar una demanda se rechaza por falta de legitimación”, dijo la orden de la corte.
A pesar del fallo de la corte, la campaña de Trump planea continuar describiendo el resultado de la elección como ilegítimo. El viernes por la noche, anunció que publicaría anuncios en YouTube, que ha comenzado a aceptar anuncios políticos nuevamente después de una moratoria, lo que explica ese mismo caso.
Los expertos legales descartaron casi universalmente la demanda de Texas como una maniobra impropia. Al invocar la "jurisdicción original" de la Corte Suprema, Texas pidió a los magistrados que actuaran como un tribunal de primera instancia para resolver una disputa entre estados, un procedimiento teóricamente posible según la Constitución, pero empleado con moderación, típicamente en casos relacionados con derechos de agua o disputas de límites.
Las afirmaciones de que la elección estuvo contaminada por un fraude generalizado han sido desacreditadas por el propio fiscal general de Trump, William P. Barr, quien dijo este mes que el Departamento de Justicia no había descubierto ningún fraude electoral "en una escala que podría haber tenido un resultado diferente en la elección."
Lo que queda es un ejercicio de limpieza judicial. Varias demandas que el presidente y sus partidarios han perdido en tribunales inferiores ahora están en apelación, tanto en el sistema estatal como en el federal, pero el proceso de apelación se está enfrentando rápidamente a una fecha límite crucial el lunes cuando se reúne el Colegio Electoral y el Sr. Biden y se espera que prevalezca en la votación, casi sellando los resultados de la elección.
ARTÍCULO POR: ADAM LIPTAK
FOTOGRAFÍA: STEFANI REYNOLDS
EDICIÓN Y TRADUCCIÓN POR: ELIANA GONZÁLEZ
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