El premier Doug Ford intentó disipar las preocupaciones sobre el sistema de certificados de vacunación de Ontario en vísperas de su implementación, diciendo que la provincia necesitaba hacer todo lo posible para mantener la lucha contra el COVID-19.
Ford dijo el martes que sabía que muchas personas estaban preocupadas de que el sistema obstaculizara sus libertades civiles; pero señaló que la mayor preocupación era experimentar un aumento repentino de infecciones y tener que cerrar la provincia nuevamente.
"Esta pandemia sigue siendo una emergencia y hay consecuencias reales al no actuar", dijo en un comunicado. “Necesitamos hacer todo lo que esté a nuestro alcance para evitar futuros bloqueos y cierres. Es por eso que estamos introduciendo estas medidas excepcionales de forma temporal y las pondremos fin tan pronto como puedan eliminarse de manera responsable".
Ford, que inicialmente se opuso a los certificados de vacunas, anunció el sistema a principios de este mes después de semanas de presión por parte de expertos, empresas y sus oponentes políticos.
A partir del miércoles, los clientes de los restaurantes, clubes nocturnos, gimnasios, instalaciones deportivas y otros lugares deberán presentar un comprobante de vacunación completa junto con una forma de identificación emitida por el gobierno. También se aceptarán las certificaciones médicas para las exenciones de salud.
El 22 de octubre, la provincia tiene como objetivo lanzar un código QR y una aplicación de verificación para que las empresas agilicen el proceso.
Las tiendas minoristas y los servicios considerados "esenciales", como las tiendas de comestibles, están exentos. Los niños menores de 12 años que no pueden ser vacunados también están exentos, al igual que los menores de 18 años que ingresan a las instalaciones para deportes organizados.
El sistema tampoco se aplica al personal del lugar.
Las multas se aplicarán a las empresas que no cumplan con los controles requeridos por el sistema y a los clientes que brinden información falsa. Pero las empresas, los ordenanzas, las fuerzas policiales y la provincia dijeron que la aplicación de la ley será suave al principio, lo que significa que gran parte del trabajo pesado recaerá en el personal de primera línea de las empresas.
El Ministerio de Salud informó el martes que el 85,2 por ciento de los habitantes de Ontario mayores de 12 años han recibido al menos una dosis de la vacuna COVID-19 y que el 79,2 por ciento están completamente vacunados.
La provincia reportó 574 nuevos casos de COVID-19 el martes y ocho muertes más relacionadas con el virus. La ministra de Salud, Christine Elliott, dijo que 434 de esos casos están en personas que no están completamente vacunadas o tienen un estado de vacunación desconocido. Hay 330 personas hospitalizadas con el virus y 303 no están completamente vacunadas.
FOTOGRAFÍA: TWITTER / @FORDNATION
EDICIÓN Y TRADUCCIÓN POR: ELIANA GONZÁLEZ
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