Los problemas de salud dominaron la campaña federal del viernes. Los liberales enfatizaron la importancia de la vacunación contra el COVID-19, los conservadores se comprometieron a mejorar los beneficios para los trabajadores gravemente enfermos y el NDP mencionó una prescripción para la atención farmacéutica universal.
Durante una parada en Mississauga, Ontario, Justin Trudeau dijo que un gobierno liberal reelegido obtendría suficientes vacunas para garantizar que todos los canadienses tengan acceso a las vacunas de refuerzo de COVID-19 gratuitas y cualquier vacuna de segunda generación necesaria.
Trudeau también prometió un fondo de mil millones de dólares para ayudar a las provincias y territorios que imponen un requisito de credenciales de prueba de vacuna para negocios no esenciales, como restaurantes y gimnasios, así como para espacios públicos.
British Columbia, Manitoba y Quebec están avanzando con los llamados pasaportes de vacunas, y Trudeau dijo que esperaba que Doug Ford los siguiera, diciendo que era hora de que el premier conservador progresista de Ontario escuche a los funcionarios de salud pública.
"Un mandato de vacunación para negocios no esenciales es una buena idea", dijo Trudeau durante su aparición en un restaurante. “Mantiene a la gente segura, anima a todos a hacer lo correcto, asegura que nuestros negocios sigan abiertos y apoya a nuestra economía en reconstrucción”.
Al visitar Thunder Bay, Ontario, el líder del NDP, Jagmeet Singh, pidió al gobierno federal que emita una credencial nacional de vacunación.
"¿No sería más fácil tener un solo documento central que obtenemos del gobierno federal y que podemos usar en cualquier provincia a la que viajemos?", dijo Singh. "Simplemente haría la vida más fácil".
Volviendo a los liberales, los manifestantes que se oponen a las mascarillas, las vacunas y las medidas de bloqueo para combatir el COVID-19 han perseguido al líder liberal en la campaña electoral.
"Esa es una elección que están expresando en voz alta y clara", dijo Trudeau el viernes. “Pero no es solo una elección que ellos mismos están tomando. Es una elección que están imponiendo a los demás. Solo terminaremos con esta pandemia si todos dan un paso al frente, no solo por sí mismos, sino por los demás".
En Corner Brook, NL, el líder conservador Erin O'Toole dijo que aumentaría los beneficios del seguro de empleo para los trabajadores enfermos de 26 a 52 semanas, una medida que podría ayudar a las personas a combatir enfermedades potencialmente mortales como el cáncer.
“Los trabajadores canadienses deben saber que los respaldamos si se enferman gravemente”, dijo O'Toole. “Estoy seguro de que todos hemos conocido a alguien, un amigo o un familiar que ha luchado contra el cáncer. Todos sabemos lo devastador que es. Entonces, todos podemos imaginarnos si, además de todo eso, también tuvieras que preocuparte por que tus beneficios se están agotando y a raíz de eso no puedes poner comida en la mesa para tu familia”.
Por su parte, Singh se comprometió el viernes a comenzar a trabajar con las provincias de inmediato para ofrecer un programa público de atención farmacéutica único para todos los canadienses.
Los nuevos demócratas dicen que millones no pueden darse el lujo de tomar los medicamentos que necesitan y deben omitir dosis, reducir sus píldoras a la mitad o incluso prescindir de ellas.
“Sabemos que no tiene por qué ser así”, dijo Singh. "Sabemos que realmente podemos trabajar juntos para resolver este problema".
El NDP dijo que negociar los precios con las compañías farmacéuticas ayudaría a que los medicamentos recetados sean gratuitos, ahorrando a una familia en promedio $ 550 al año.
Cuando se le preguntó cómo conseguiría la aceptación del plan en todo el país, Singh dijo que ahorraría dinero no solo para las personas, sino también para las provincias.
FOTOGRAFÍA: TWITTER / @JUSTINTRUDEAU
EDICIÓN Y TRADUCCIÓN: ELIANA GONZÁLEZ
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