Está previsto que un avión fletado aterrice en Canadá el lunes con hasta 175 refugiados ucranianos que huyen de la crisis entre Ucrania y Rusia, la cual cumple ya dos meses y medio de violencia continua.
El vuelo es el primero en llegar a St. John's, NL, como parte de un esfuerzo masivo liderado por la provincia e impulsado por una red de voluntarios que quieren asegurarse de que los ucranianos estén seguros, alojados y atendidos.
La provincia abrió una oficina satélite en Varsovia, Polonia, en marzo para ayudar a los ucranianos que huyen de los ataques rusos, superando a Ottawa por casi dos meses.
Se produce cuando el presidente ruso, Vladimir Putin, usó su discurso del Día de la Victoria en la Plaza Roja para profundizar en su afirmación de que Ucrania representaba una amenaza para Rusia, a pesar de que las fuerzas armadas nucleares de Moscú son muy superiores en número y potencia de fuego.
No declaró ni siquiera una victoria limitada ni señaló hacia dónde se dirige el conflicto, como algunos esperaban.
Mientras Putin colocaba una ofrenda floral para conmemorar la derrota de la Alemania nazi por parte de la Unión Soviética, las sirenas de ataque aéreo sonaron en Kiev, donde el presidente Volodymyr Zelenskyy usó su discurso del Día de la Victoria para declarar que su país eventualmente derrotaría a los rusos.
Mientras tanto, la condena internacional sigue siendo alta contra Putin, con nuevas sanciones anunciadas contra su gobierno en los últimos días.
El primer ministro Justin Trudeau dijoque tener la bandera canadiense ondeando una vez más en las calles de Kiev es solo otro testimonio de la fuerza y la solidaridad de los canadienses y los ucranianos.
Trudeau realizó una visita no anunciada a Ucrania el domingo, donde reabrió la embajada de Canadá en Kiev.
Después de reunirse con el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy, Trudeau también anunció un nuevo apoyo militar canadiense, así como nuevas sanciones a otras 40 personas y entidades rusas.
La primera dama de Estados Unidos, Jill Biden, también realizó una visita sorpresa a Ucrania durante el fin de semana para mostrar su apoyo a la asediada nación mientras Rusia continúa su guerra contra las regiones del este.
Biden pasó el Día de la Madre reuniéndose con la primera dama de Ucrania, Olena Zelenska, así como reuniéndose con madres ucranianas que han sido desplazadas por la guerra de Rusia y asegurándoles que los “corazones del pueblo estadounidense” están detrás de ellas.
“Quería venir el Día de la Madre”, le dijo la primera dama de Estados Unidos a Zelenska. “Pensé que era importante mostrarle al pueblo ucraniano que esta guerra tiene que parar y que esta guerra ha sido brutal y que el pueblo de Estados Unidos apoya al pueblo de Ucrania”.
El primer ministro italiano, Mario Draghi, se reunió con el presidente estadounidense, Joe Biden, esta semana en Washington, mientras Europa se enfrenta a otro momento de "cueste lo que cueste" con la guerra de Rusia en Ucrania en su flanco oriental.
Tanto Roma como Washington enfatizarán su amistad histórica y el deseo compartido de ayudar a Ucrania a defenderse de la invasión rusa de dos meses cuando los líderes se reúnan el martes. La energía, el cambio climático y la promoción de la prosperidad económica mundial también están en la agenda.
Aún así, hay diferencias de tono sobre la guerra, y está creciendo el sentimiento público en Italia contra el envío de armas a Ucrania.
El sentimiento público contra el envío de armas a Ucrania ha crecido a casi la mitad, según Renato Mannheimer, sociólogo de la agencia de investigación social y de mercado Eumetra. Parte de ese sentimiento tiene sus raíces en el pacifismo, y parte está relacionado con los temores de iniciar una guerra más amplia, incluidos los temores de una escalada nuclear, dijo.
Los italianos mayores de 40 años tienen recuerdos palpables de su ubicación geográfica cercana a Ucrania. Poco después del desastre nuclear de Chernobyl en 1986, la contaminación nuclear llegó a Italia y se advirtió a los italianos que no comieran ensalada ni bebieran leche durante semanas.
Italia ya ha invocado el secreto sobre su apoyo militar por motivos de seguridad. Pero Draghi también puede señalar el apoyo abrumador del parlamento para ayudar a Ucrania el mes pasado para minimizar cualquier fricción dentro de su amplia coalición.
“Tal vez el mensaje que Draghi le traerá a Biden es: 'Estamos del lado de los estadounidenses; pero no hagamos de esto una guerra del bien contra el mal, de la luz contra la oscuridad'”, dijo Alessia De Luca, una analista político del think tank ISPI de Milán. “Este es un riesgo porque los estadounidenses tienen esta forma binaria de ver las cosas. Para nosotros, los europeos, las consecuencias del desbordamiento de la guerra son dramáticas”.
ARTÍCULO POR: CLAIRE FENTON
FOTOGRAFÍA: FRANCISCO SECO
EDICIÓN Y TRADUCCIÓN POR: ELIANA GONZÁLEZ
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