La mayoría de los participantes de una encuesta recientemente publicada en todo Canadá dijeron que están preocupados por la propagación del COVID-19 en las escuelas y quieren que los niños y el personal continúen con el uso de mascarillas.
La encuesta, realizada por el Centro Canadiense de Investigación Social y Aplicada de la Universidad de Saskatchewan, se realizó por teléfono entre el 3 y el 28 de septiembre y le preguntó a 1.000 personas sobre cualquier preocupación relacionada con el hecho de enviar a los niños a la escuela y sus opiniones sobre qué órdenes de salud pública deberían haber en estos lugares.
La mayoría de los encuestados, el 89 por ciento, dijeron que estaban vacunados. De aquellos con niños de 12 años o más que son elegibles para recibir una dosis, el 81 por ciento dijo que sus hijos también fueron vacunados.
“Aquellos que están vacunados tienen más probabilidades de tener niños vacunados y quieren ver a los niños en las escuelas y al personal con mascarillas”, dijo el director de investigación Jason Disano.
Los padres han estado observando de cerca el regreso de los niños a las aulas en todo el país durante la cuarta ola de la pandemia y la encuesta mostró que los encuestados confiaban en gran medida en las medidas preventivas implementadas en las escuelas de sus hijos.
Disano dijo que era interesante ver que los padres no vacunados eran más propensos a confiar en otros padres para mantener a los niños en casa si presentaban síntomas.
"Eso se alinea con las opiniones de aquellos que no están vacunados... hay un nivel de responsabilidad personal", dijo.
Muchos participantes, el 70 por ciento de los encuestados, dijeron que todavía estaban preocupados por la propagación del virus en las escuelas de su área. Al 69% también le preocupaba la propagación en las instituciones postsecundarias.
Los investigadores dijeron que la encuesta tenía un margen de error del 3,1 por ciento, más o menos, 19 veces de 20 a nivel nacional.
Anteriormente, hubo un puñado de protestas en torno a los requisitos del uso de mascarillas en las escuelas de todo el país, cuando los niños regresaron a clases el mes pasado. La encuesta encontró que el 78 por ciento de los encuestados apoyaba el uso de mascarillas en las escuelas.
Quebec y las provincias de las praderas (Prairie provinces) mostraron menos probabilidades que otras regiones de apoyar la medida.
Los encuestados en las provincias de las praderas también fueron menos propensos a querer otras órdenes de salud pública, incluidas las restricciones a las grandes reuniones públicas o la necesidad de aislarse si alguien da positivo por COVID-19.
Los gobiernos de Alberta y Saskatchewan relajaron significativamente o eliminaron por completo las órdenes de salud pública durante el verano. Mandatos como el uso obligatorio de mascarillas y los requisitos de aislamiento fueron eliminados.
A medida que se acercaba la temporada de regreso a clases, ambas provincias experimentaron un aumento de las infecciones que, según las autoridades, amenazaban con sobrecargar los hospitales. Los sindicatos que representaban a los maestros en las praderas pidieron más restricciones en las escuelas y en la comunidad.
"Los maestros y el personal escolar están haciendo todo lo posible para proteger a los estudiantes en sus aulas; pero sin medidas de protección consistentes, los niños de Saskatchewan que son demasiado pequeños para ser vacunados pagarán el precio", dijo Patrick Maze, presidente de Saskatchewan Teachers Federación, el mes pasado.
Posteriormente se restablecieron algunas órdenes de salud pública. Saskatchewan ahora requiere uso de mascarillas en todas las escuelas y Alberta las requiere para los estudiantes de cuarto grado en adelante. Esa provincia también ha restablecido el rastreo de contactos en las escuelas y la notificación pública de las escuelas con brotes.
Los encuestados en Ontario fueron más propensos a querer máscaras en todos los lugares públicos interiores y restricciones sobre el número de personas en las empresas.
En general, las mujeres apoyaban más las órdenes de salud pública que los hombres, según la encuesta.
Disano comentó que había mucha variabilidad en las respuestas de las personas con respecto a las pautas de salud pública en todo Canadá.
Los encuestados en Ontario, Quebec y las provincias marítimas (The Maritimes) aceptaron más las reglas, mientras que en las provincias de las praderas fue más probable que se apoyaran regulaciones más flexibles sobre temas como el tamaño de los grupos en las reuniones en exteriores e interiores.
A raíz de eso, Disano dijo que sospecha que el nivel de agotamiento pandémico de las personas también tiene su origen en el lugar donde viven y las restricciones actuales allí.
Aquellos que están cansados de las restricciones, para empezar, las apoyan menos, dijo. Es más probable que vivan en provincias en donde ya se han flexibilizado las órdenes de salud pública.
“Las opiniones y percepciones de la gente sobre esas pautas reflejan los mandatos vigentes en sus respectivas regiones”, dijo. "Parece que el gobierno en general va acorde a la opinión pública".
ARTÍCULO POR: KELLY GERALDINE MALONE
EDICIÓN Y TRADUCCIÓN: ELIANA GONZÁLEZ
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