El programa de asistencia de alquiler comercial de emergencia de Canadá vencerá después del lunes, pero las pequeñas empresas que aún luchan por la pandemia de COVID-19, están pidiendo al gobierno federal que las ayude.
La Federación Canadiense de Empresas Independientes está pidiendo al gobierno de Trudeau que extienda el sistema de apoyo y que le haga un gran cambio.
La situación financiera que enfrentan muchas empresas pequeñas, medianas e independientes sigue siendo grave: un tercio dice que no están recibiendo los apoyos de alquiler que necesitan para seguir adelante, y una de cada siete afirma estar en grave riesgo de cerrar.
Laura Jones de CFIB agrega que si el programa se extiende, el gobierno federal también debería eliminar el requisito de participación de los propietarios.
“El problema con eso es que algunos propietarios no pueden o no quieren participar en el programa. Y eso puede hacer que todo su futuro como negocio dependa de otra persona”, dice Jones, vicepresidente ejecutivo de CFIB.
Jones señala que el propietario de una pequeña empresa puede calificar desde el punto de vista de la reducción de ingresos, pero sí el propietario no está dispuesto a involucrarse, la empresa se encuentra en una situación difícil.
“Hay mucha injusticia sobre si obtiene el alivio del alquiler o no porque esa decisión está totalmente en manos de su arrendador”, explica, y dice que las empresas deberían poder acceder a los fondos directamente.
Con el reloj corriendo hasta el día del alquiler, Jones y otros esperan que la nueva ministra de Finanzas, Chrystia Freeland, escuche sus preocupaciones.
ARTÍCULO POR: HANA MAE NASSAR
EDICIÓN Y TRADUCCIÓN: ELIANA GONZÁLEZ
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