Se espera que los organizadores olímpicos decidan si se permitirá la entrada de espectadores nacionales a las sedes y en qué medida el día lunes. Una decisión que, según los expertos en salud, tendrá implicaciones para la seguridad pública durante la pandemia del coronavirus.
Japón está avanzando con la celebración de los juegos de miles de millones de dólares, que ya se retrasaron un año debido a la pandemia, a pesar de las preocupaciones sobre un resurgimiento de las infecciones por COVID-19 y la oposición pública.
La presidenta de Tokio 2020, Seiko Hashimoto, ha dicho que tenía previsto un límite de 10.000 personas por lugar. Los espectadores extranjeros ya se han prohibido en el evento.
Los funcionarios están considerando permitir que hasta 20.000 personas asistan a la ceremonia de apertura el 23 de julio como espectadores, en parte, debido a un aumento en la cantidad de personas involucradas en los Juegos que ya no tendrán permitido estar en el campo, informaron los medios.
Se espera que la decisión final sobre los espectadores nacionales se tome en la reunión del lunes entre los organizadores de Tokio 2020, el Comité Olímpico Internacional, el Comité Paralímpico Internacional, el gobierno japonés y el gobierno metropolitano de Tokio.
Está previsto que Hashimoto y el director ejecutivo de Tokio 2020, Toshiro Muto, celebren una conferencia de prensa después de las conversaciones de los cinco grupos involucrados.
La reunión se producirá después de que algunos de los principales expertos en salud de Japón dijeran el viernes que prohibir a los espectadores era la opción menos riesgosa para la celebración de los Juegos, incluso cuando parecían resignados a la posibilidad de que hubiera aficionados en las sedes.
El público de Japón sigue oponiéndose a la celebración de los Juegos este verano; pues una encuesta realizada del 19 al 20 de junio por Asahi News Network (ANN) encontró que un 65% de los encuestados preferirían que el evento se pospusiera nuevamente o se cancelara.
Casi el 70% de los encuestados dijeron que pensaban que los Juegos no se llevarán a cabo de manera segura, tal y como lo afirmaron el primer ministro japonés Yoshihide Suga y los organizadores olímpicos, mostró la encuesta.
La semana pasada, Suga decidió levantar el estado de emergencia por coronavirus para Tokio y otras ocho prefecturas que habían visto un resurgimiento de COVID-19.
El gobierno mantuvo restricciones menores para siete de las nueve prefecturas, incluido Tokio, medidas que se extenderán hasta el 11 de julio, menos de dos semanas antes de que comiencen los Juegos, el próximo 23 de julio.
ARTÍCULO VÍA REUTERS
FOTOGRAFÍA: KIM KYUNG-HOON EDICIÓN Y TRADUCCIÓN POR: ELIANA GONZÁLEZ MÁS INFORMACIÓN DEPORTIVA
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