Canadá aconseja a los viajeros que estén atentos a los brotes de Oropouche vírica notificados en América, donde el número total de casos es superior al previsto y en algunos países se han registrado las primeras infecciones de la historia.
La enfermedad se transmite a los humanos a través de la picadura de un jején, y posiblemente de mosquitos. Los síntomas incluyen fiebre, fuertes dolores de cabeza, vómitos y mareos.
En la actualidad no existe vacuna para el virus, que forma parte de la misma familia de enfermedades que el Zika y el dengue.
El virus ha circulado tradicionalmente por Centroamérica y Sudamérica, pero este año también se ha extendido a nuevos lugares como Cuba, Italia y España, según una investigación publicada el 8 de agosto en The Lancet.
«Las infecciones arbovirales han golpeado fuertemente a Sudamérica en la última década.... Además, la región se enfrenta ahora a la reaparición de otro arbovirus poco conocido, el virus de Oropouche, a una escala sin precedentes», afirma el trabajo de investigación.
Hasta el 1 de agosto, se habían confirmado 8.078 casos de fiebre de Oropouche en la región, notificados en Bolivia, Brasil, Colombia y Perú, informó The Lancet. En 2023, sólo se habían registrado 832 casos.
Debido a la propagación del virus, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC) han alertado recientemente sobre la fiebre de Oropouche.
Los casos detectados en España, Italia y Alemania fueron personas que recientemente habían viajado a Brasil y a Cuba.
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