El ministro de indústria, Francois-Philippe Champagne, fue cuestionado por los periodistas sobre el paso que dio ayer Rogers, al lanzar su servicio de telefonía móvil en el metro de Toronto antes que las operadoras de la competencia.
Champagne había iniciado un proceso de consulta entre Rogers, Bell y Telus para llegar a un entendimiento en mediante el cuál todas las operadoras pudieran brindar el servicio a los usuarios del TTC cuanto antes. Los reporteros le preguntaron al ministro si estaba molesto con la movida de Rogers de lanzar el servicio de manera unilateral y esta fue su respuesta:
Rogers compró en abril las operaciones canadienses de BAI Communications, que poseía los derechos para proporcionar servicios inalámbricos en el metro de Toronto.
Rogers se ha comprometido a trabajar con sus rivales y hacer que un sistema actualizado sea accesible para que lo utilicen otros operadores, pero sus rivales han expresado su preocupación por los planes de la compañía de lanzar el servicio primero que los demás y habían pedido que pudieran hacerlo todas al mismo tiempo.
El ministro Champagne evitó calificar como positivo o negativo que Rogers empezara a brindar el servicio antes que sus competidoras.
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