El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró la noche del lunes que condujo personalmente el proceso que culminó en el exilio del excandidato presidencial opositor, Edmundo González Urrutia, pero dijo que no revelaría detalles detrás de ese movimiento. Además aseguró que respeta la decisión del que es considerado como presidente electo de Venezuela de abandonar el país y le deseó suerte.
González Urrutia, quien llegó a España el domingo junto a su esposa tras solicitar asilo político, aseguró ayer en un comunicado que la libertad de las personas privadas de libertad que lo han apoyado es para él una “gran prioridad” y “una exigencia irrenunciable”, sin aclarar si hubo una negociación para lograr la liberación de presos políticos.
Previamente afirmó que su salida de Caracas estuvo rodeada de “episodios de presiones, coacciones y amenazas”.
El excandidato presidencial, un embajador retirado de 75 años, afirmó que tomó la decisión “pensando en Venezuela”, en su familia y en “todas las familias venezolanas en este momento de tanta tensión y angustia”.
Hoy el abogado de Edmundo González, Vicente Haro, confirmó que González no podrá participar en manifestaciones en España hasta tanto regularice su situación en ese país.
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