Los premiers de varias provincias están llamando al gobierno federal a que suprima el aumento del impuesto al carbono previsto para el 1 de abril.
A partir del mes que viene el precio federal del carbono 15 dólares, pasando de 65 a 80 dólares por tonelada. Esta tasa se aplica en todas las provincias excepto en Columbia Británica y Quebec, que tienen sus propios sistemas provinciales de fijación del precio del carbono.
El último premier en sumarse al pedido ha sido el liberal Andrew Furey, de Terranova y Labrador. Furey envió una carta a Trudeau pidiéndole que reconsiderara la política en el contexto de lo que llamó “la crisis de costo de la vida más importante de la última generación”. En su carta pidió suspender el aumento, al menos hasta que la inflación se estabilice.
La petición de Furey fue secundada rápidamente en las redes sociales por varios premiers conservadores, como Tim Houston, de Nueva Escocia; Blaine Higgs, de Nuevo Brunswick; Danielle Smith, de Alberta; Scott Moe, de Saskatchewan; y Doug Ford, de Ontario.
Hoy el primer ministro Trudeau tuvo una reunión con la Premier de Alberta, Danielle Smith y el tema del aumento al impuesto al carbono estuvo en la agenda.
Doug Ford incluso advirtió al gobierno hace unos días que no detener el aumento les saldrá caro en las próximas elecciones.
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